Cambios climáticos, aumentos de precios de la energía y escasez de mano de obra empujan a revisar la gestión de los cultivos protegidos.
Aunque se hable de entornos controlados, tampoco invernaderos y viveros son inmunes a los grandes retos de la época en la que actualmente vivimos: el cambio climático, la subida de los costes de energía eléctrica, la crisis hídrica y la disponibilidad limitada de maniobra especializada son solo algunas de las situaciones que están poniendo a prueba también los que gestionan cultivos protegidos. A pesar de esto, optimizando la organización y con el uso de las mejores soluciones tecnológicas, es posible enfrentar de manera eficaz estas dificultades medioambientales y logísticas: ya veremos cómo.
Cambios climáticos
Los cambios climáticos pueden ser interpretados a partir de dos perspectivas ambivalentes: si por un lado el calentamiento global y la polución atmosférica marcaron un aumento de la producción hortícola en invernaderos, al poder contar con un clima generalmente más saludable para el crecimiento de las plantas, por otro lado los choques térmicos constantes y los altos niveles de humedad pueden de toda forma favorecer la reproducción de parasitas y otros agentes patógenos con el riesgo de poner en peligro el crecimiento de las plantas. Este problema se puede gestionar lavando y saneando atentamente las bandejas de siembra antes de los usos sucesivos y tratando constantemente los cultivos con soluciones de fertiirrigación.
Nuestra lava bandejas LV 1200, disponible en las versiones “estándar” y “U”, permite gestionar de manera completamente automática el proceso de limpieza y desinfección de bandejas y contenedores de cualquier material y tamaño, representando un aliado optimo para la lucha al desarrollo de parasitas perjudiciales para los cultivos.
Crisis energética
El cambio climático es uno de los muchos factores que han determinado la subida de los precios de la energía eléctrica y la escasez de agua: problemas que han puesto a prueba duramente el sector hortícola. A pesar de esto, es posible cultivar de manera sostenible, abatiendo los consumos de recursos energéticos, invirtiendo en sistemas modernos y más eficientes, para que se eviten desperdicios y se pueda ahorrar en los costes de gestión generales de la estructura.
Nuestras alas móviles de irrigación pueden ser programadas para otorgar a los cultivos protegidos solo la cantidad necesaria de agua y nutrientes, permitiendo un ahorro hídrico mayor con respecto a la irrigación manual y a la mayoría de los sistemas en el mercado.
Escasa disponibilidad de maniobra
Quien posee un invernadero o un vivero tiene que enfrentar también el problema de la falta de obreros especializados que pone en peligro el ritmo de marcha de todas las actividades productivas. Además, la llegada de sistemas informatizados cada vez más avanzados deja pensar que en los próximos años las operaciones manuales hechas dentro de estas estructuras serán en diminución constante, hasta llegar a la necesidad de automatizar todo el proceso de producción, empezando por la siembra en bandejas.
Nuestra línea de siembra de rodillo TTL1200 permite gestionar de manera completamente automática las fases de relleno, impresión y siembra, cobertura y bañado de cualquier contenedor alveolado para plántulas de cualquier material y tamaño, garantizando una capacidad de producción que alcanza los 1200 contenedores por hora.
¡Atlantic Man. os puede ayudar!
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